Quito, una capital entre las nubes

Quito es la capital del Ecuador y su principal derecho a la fama radica en su ubicación: está a tan sólo 22 millas al sur del ecuador terrestre. Uno podría pensar que, por su ubicación, Quito no tiene estaciones. Pero esto no es así. Si bien la mayoría de la superficie continental de América del Sur disfruta del verano, en Quito se presenta lo que se denomina la estación seca. Consiguientemente, el invierno es la estación húmeda. Por lo general, en Quito las temperaturas son moderadas, y la temperatura promedio durante el día es de unos agradables 70º F. No obstante, las noches pueden ser frescas, debido a la gran altitud a la que se encuentra la ciudad. De hecho, Quito es la segunda capital más alta del mundo. Quito se encuentra en el valle de la cuenca del río Guayllabamba, rodeada por las montañas y volcanes de la región de la cordillera al norte del país. Algunos de estos volcanes están en actividad y el más próximo es el Pichincha. De tanto en tanto, el Pichincha o alguno de los volcanes de la zona hace erupción y baña a Quito con ceniza volcánica.

La población actual de Quito es de casi 2 millones de personas, y esta ciudad mantiene tradicionalmente una vigorosa rivalidad con otra ciudad importante del Ecuador, Guayaquil, que se sitúa en la costa del Pacífico.

El aire puro de montaña y el paisaje espectacular de Quito han demostrado ser una especia de imán para el turismo de todo el mundo. La ciudad se ha provisto de la infraestructura necesaria para satisfacer las necesidades de la actividad turística, incluida la limpieza y el mejoramiento de la accesibilidad del Centro histórico. El Centro histórico cuenta con museos, catedrales y parques. Los que prefieran una vista panorámica de Quito pueden subir al teleférico, el cual transporta a los visitantes en un paseo asombroso desde el centro de la ciudad hasta Cruz Loma, que se encuentra a unos 12.000 pies de altura sobre la ladera del volcán Pichincha. Si los turistas pueden separarse de la inigualable vista de la ciudad que se encuentra a sus pies, hallarán una abundancia de comercios y restaurantes. De todas formas, lleve un abrigo, ya que la temperatura puede disminuir un poco a medida que uno asciende hacia las nubes que se encuentran por encima de Quito.