Ecuador: El Arte de Tejer los Sombreros de Panamá: Primera Parte
El arte de tejer, ya sean tapices o vestimenta, representa una fuente de trabajo muy importante para muchos hombres y mujeres ecuatorianos. En particular, la pequeña población de Montecristi goza de renombre internacional por la alta calidad de sus tejidos: los “Sombreros de Panamá”. Y antes de que piense que se trata de un error tipográfico, créalo o no, los sombreros de Panamá se produjeron siempre en Ecuador… ¡no en Panamá!
Al pie de una gran colina llamada Montecristi, la pequeña población del mismo nombre tiene mucho que ofrecer a los visitantes, además de los sombreros de Panamá. Entre las diversas atracciones se encuentran la finca del ex presidente del Ecuador, Eloy Alfaro, el Museo Hermanas Largacha y el Santuario de Monserrat, adonde por tradición concurren miles de peregrinos extranjeros y ecuatorianos para meditar, reflexionar y buscar el sentido de la vida. Otro sitio de interés es La Pila, donde los artesanos modelan diversas esculturas y réplicas de la cerámica precolombina.
Pero son sus sombreros de Panamá los que atraen un flujo constante de turistas. Montecristi hace gala de un puñado de maestros tejedores, los creadores de los mejores sombreros de paja del mundo. Los sombreros son tan buenos (o, al menos, eso es lo que se dice) que, prácticamente, no hay palabras para describirlos. Los sombreros de Panamá de Montecristi se hacen con paja toquilla, separada a mano en fibras no más gruesas que una hebra y tejida tan finamente que, a primera vista, un sombrero de Panamá parece hecho de hilo. Obras maestras del detalle, los bordes de estos sombreros nunca se recortan y cosen, sino que se entrelazan en el ala, a diferencia de lo que ocurre con los sombreros de Panamá de menor calidad. Cada sombrero de Panamá es obra de un solo artesano, en hormas manuales, y lleva meses terminarlo.
Pero para aquéllos que valoran y comprenden la técnica, el tejido de los sombreros de Panamá es un arte en vías de extinción. En su auge, había casi 2,000 artesanos en Montecristi; en la actualidad, hay menos de 50. Al igual que muchas artesanías, el futuro de la “industria” se encuentra en manos de la generación más joven, de la cual se espera que esté lo suficientemente interesada como para dedicarse a ella.
Desde la ciudad de Quito, puede llegar fácilmente a Montecristi en autobús. Para ponerse en contacto con agencias de turismo que pueden coordinar excursiones de un día (o más) a esta ciudad fascinante, visite el enlace de excursiones en Ecuador.com.
